Ole Smoky Moonshine Lemon Drop

En nariz este Moonshine ofrece aromas de notas frescas del limón cortado, del caramelo toffee duro, de la piel de la fruta cítrica y de la especia picante. El paladar es muy similar, añadiendo un poco de espesor y dulzor. El acabado es corto y cítrico, con un sabor más intenso de limón.

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La creciente popularidad entre los consumidores y el número de ‘moonchines’, destiladores (ilegales) artesanales de whisky en USA, una verdadera revolución,  hace que se extienda su presencia también en Europa, gracias a Ole Smoky Distillery.

Por supuesto, estamos hablando de alcohol legal en este caso. La palabra ‘moonshine’ evoca las prácticas ilícitas de los años de la prohibición, por otra parte, sumamente peligrosas, ya que muchos de estos destiladores clandestinos no sabían cómo separar del alcohol destilado, el corazón de los extremos, realmente nocivos para la salud. Fenómeno que llevó al gran éxito conseguido por la destilería Ole Smoky de Gatlinburg, Tennessee.

En junio de 2010, la destilería Ole Smoky comenzó a destilar ‘shine’ en su alambique. Esta es la primera destilería legal en Tennessee que se centra en la producción del ‘moonshine’, con su fundador Joe Baker a la cabeza, quien cuenta con una rica herencia de su familia en la elaboración del ‘moonshining’, que se remonta a unas cuantas generaciones.

La destilería se llama «Ole Smoky,» por la cadena de montañas Smoky Mountains que rodea la destilería, no debido a que sea ahumado ‘smokey’.

Cada ingrediente que entra en la elaboración del ‘moonshine’ es de origen local. El maíz, llamado Hickory Cane Corn, una variedad centenaria y rara, se cultiva en el condado de Jefferson. Este tipo de maíz era el único que se cultivaba en la zona, dando en la actualidad aún más sabor y autenticidad a la historia de este ‘moonshine’.

La gama de Ole Smoky Moonshine incluye distintos sabores, como el de tarta de manzana o arándanos… De momento, hemos apostado por las expresiones más genuinas de la destilería, que son: Moonshine Original y Harley Davidson. Y también por la tradicional americana de Tarta de manzana y la edición muy limitada de Lemon Drop.